Última actualización el 13 marzo, 2017 por
Lifting de cara y cuello
El Lifting Facial (también conocido como Ritidectomía) es una técnica quirúrgica que tiene por objeto rejuvenecer el rostro colocando en el lugar correcto las estructuras de la cara que, debido al paso de los años, se han descolgado. Las mejillas se aplanan y los surcos de la cara se acentúan, las comisuras de la boca caen y la barbilla pierde definición.
Las incisiones quedan en los márgenes de las orejas y en ocasiónes dentro de las sienes de forma que cási todas quedan ocultas. Esta cirugía se combina normalmente con la mejora de la frente, párpados y cuello. Se realiza con anestesia general o con anestesia local con sedación y normalmente requiere una noche de ingreso en Hospital. Los “miniliftings” son intervenciones planeadas para pacientes relativamente jovenes que precisan de correcciones menores.
Es necesario un estudio preoperatorio completo y una intensa valoración previa a la operación. Necesitará una recuperación de al menos una semana en función del tipo de lifting.
Indice
¿Qué es un Lifting Facial o Ritidectomía?
A medida que las personas envejecen, el efecto de la gravedad, de la exposición solar y del estrés diario producen en la cara determinados signos de envejecimiento. Los pliegues entre la boca y la nariz se acentúan, el borde mandibular pierde definición y se producen acúmulos grasos al rededor del cuello.
Un lifting o Ritidectomía no para el proceso de envejecimiento pero si puede “retrasar el reloj” y mejorar esos signos de envejecimiento.
Los mejores candidatos para un Lifting
Los mejores candidatos para un Lifting son aquellas mujeres u hombres con un buen estado de salud en los que la piel ha empezado a descolgarse pero esta sigue manteniendo un buen grado de elasticidad. Un Lifting no tiene por que rejuvenecerle un determinado numero de años, pero si conseguirá devolverle un mejor aspecto y una apariencia más joven.
Un Lifting podrá mejorar su apariencia y su autoestima, pero no necesariamente cambiará la apreciación que los demás tengan de Ud., no necesariamente tiene que proporcionarle la imagen “ideal” o satisfacer sus expectativas. Antes de decidirse por este tipo de cirugía piense cuidadosamente en sus expectativas y discútalas con nosotros ya que tiene multitud de variantes y no todas estarán indicadas en su caso.
Cuándo está contraindicado un Lifting Facial
Una lifting facial nunca debe ser realizada en pacientes que presentan alguna infección activa en su cuerpo, en pacientes con alteraciones de la coagulación de la sangre o en la cicatrización de los tejidos, en pacientes con debilidad en el sistema inmune o en pacientes que están o pudieran estar embarazadas.
Cualquier paciente con una enfermedad mental en tratamiento debería esperar a la estabilización o resolución de su estado. Pacientes con expectativas poco realistas o perfeccionistas no deberían someterse a ninguna cirugía. Algunas de estas circunstancias suponen una contraindicación temporal, otras suponen una contraindicación absoluta.
Riesgos e incertidumbres
De forma habitual las complicaciones que aparecen son leves. De todos modos las variaciones que pueden existir en la anatomía, la capacidad curativa y la reacción física de distintos pacientes hacen que el resultado final nunca pueda ser predecible.
Como complicaciones pueden aparecer hematomas (acúmulos de sangre bajo la piel), infección, reacciones anómalas a la anestesia o lesión de estructuras profundas o de los nervios que controlan el movimiento de los músculos faciales.
La curación anómala o retardada de las heridas es más propia de fumadores que de no fumadores.
El Lifting, como otros procedimientos, debe ser individualizado para cada paciente. Dependiendo de las condiciones en las que se encuentre su piel, musculatura y huesos faciales, se podrán conseguir determinados resultados. Es muy importante que avise sobre cualquier medicamento que esté tomando (especialmente Aspirina) o sobre condiciones medicas especificas (como tener la tensión alta). Si Ud. fuma es muy importante que intente dejarlo al menos durante las dos semanas anteriores a la intervención y la semana posterior a esta.
Cómo se realiza un Lifting
Un Lifting facial puede ser realizado bajo anestesia local o bajo anestesia general.
Dependiendo de la anestesia y de la extensión del Lifting es posible que necesite ingresar al menos un día. En ocasiones se realiza de forma ambulatoria. Cada caso puede variar en cuanto a la colocación y extensión de las incisiones, las áreas de la cara que se quieren mejorar, el uso o no de técnicas complementarias (cirugía de párpados, aumento de pómulos, rellenos de grasa, etc.) y la duración de la intervención.
Cuando el componente único o principal a tratar es la cara (con o sin el cuello) la incisión comienza en la zona de las sienes (por dentro del pelo o delante de la patilla), se extiende dentro de las lineas naturales que existen delante de la oreja y continua alrededor del lóbulo, detrás de la oreja y cuero cabelludo.
Cuando el cuello necesita un tratamiento especial es necesario emplear una incisión justo debajo del mentón. En ocasiones es necesario realizar dos incisiones dentro de la boca para elevar convenientemente y dar forma adecuada a los pómulos sin necesidad de emplear prótesis. Si en su caso se le ha recomendado el tratamiento de los párpados le entregaremos el folleto de blefaroplastia para completar la información. La realización de un lifting de frente simultáneamente suele ser una práctica habitual cuando se pretende un rejuvenecimiento “total” (ver más adelante). Aunque es posible realizar liftings parciales de cara, cuello o frente lo habitual y, generalmente, más aconsejable es afrontar un rejuvenecimiento total que evitará crear zonas “rejuvenecidas” al lado de zonas “envejecidas”.
La intervención de lifting facial consiste básicamente en “tensar” las capas musculares y recolocar la piel, retirando el tejido sobrante. Una vez concluido, las heridas se cierran con puntos dejando unos pequeños tubos bajo la piel para que no se acumule ningún exudado o sangre. Finalmente se colocará un vendaje ligero. Es posible realizar tipos de lifting menos “extensos” como por ejemplo el de 1/3 medio para elevar sólo mejillas y pómulos, el de cuello, el lifting de frente y cejas o el minilifting de cara. La aplicación de estas técnicas dependerá de la gravedad y localización de su problema. El beneficio de estas técnicas es ofrecer operaciones más limitadas, con postoperatorio más corto y menor incidencia teórica de complicaciones. Su principal indicación es en pacientes jóvenes que tienen signos incipientes de envejecimiento.
Después de la operación
El postoperatorio no suele ser doloroso. Las molestias que generalmente aparecen suelen controlarse bien con analgésicos habituales. El vendaje y los tubos de drenaje normalmente se retiran en 24 a 48 horas.
Es normal que sienta la piel de la cara algo “acorchada”, esta sensación es transitoria y desaparece en unas cuantas semanas. Considere como normal que la cara esté inflamada y presente moraduras, este aspecto solo durará unos 10 – 15 días si sigue nuestras instrucciones. Es aconsejable que no trabaje y que evite los ejercicios o actividades violentas durante al menos las dos semanas siguientes a la operación. La piel de la cara necesitará cuidados específicos y no deberá exponerla al sol o a rayos UVA durante al menos tres meses.
Aunque al principio pueda sentirse preocupado por el aspecto de la cara, piense que la mayoría de los pacientes regresan a una vida normal (incluyendo su trabajo) en unas dos a tres semanas.
En este periodo la inflamación se normaliza y desaparecen las moraduras. Las cicatrices tardan algunas semanas más en disimularse, pero finalmente se hacen prácticamente imperceptibles.
Un lifting no para “el reloj”, pero proporciona un rejuvenecimiento muy duradero y llamativo. Este folleto le ofrece un aspecto general de esta operación pero puede que no aclare todas sus dudas. Debido a que se trata de una intervención con muchas variantes el estudio pormenorizado de su caso es muy importante y permitirá, a demás, aclarar todas sus dudas.
Opciones para mejorar el cuello
Los signos de envejecimiento en el la cara y el cuello suelen ir paralelos y es raro que una zona empeore con mayor rapidez o severidad que otra. No obstante, puede que Ud. quiera solamente mejorar el aspecto de su cuello por diferentes razones. Los problemas más frecuentes que afectan al cuello son el exceso de grasa, la flaccidez y descolgamiento de la piel, la presencia de bandas marcadas o una combinación de estos.
Este folleto le dará información básica sobre como se realizan los tratamientos del cuello y que resultados puede esperar de estas operaciones.
Los mejores candidatos para un tratamiento de cuello
Los mejores candidatos para un tratamiento de cuello son aquellas mujeres u hombres en los que se muestran signos de envejecimiento, acúmulos de grasa u otros como los descritos anteriormente. Estos signos pueden ser intensos o leves, determinando el tipo, extensión y localización de las incisiones. Un tratamiento de cuello puede mejorar su aspecto y su autoestima pero no necesariamente tiene que proporcionarle la imagen “ideal” o satisfacer sus expectativas. Si existen signos similares en el resto de su cara es posible que se le aconseje tratarlos también para no producir alteraciones significativas en el balance total de la cara y el cuello.
Riesgos e incertidumbres
Cuando estos tratamientos están realizados por un Cirujano Plástico cualificado las complicaciones son infrecuentes y habitualmente leves. De todos modos las variaciones que pueden existir en la anatomía, la capacidad curativa y la reacción física de distintos pacientes hacen que el resultado final nunca pueda ser predecible.
Como complicaciones pueden aparecer hematomas, infección, reacciones anómalas a la anestesia y materiales de sutura, lesión de estructuras profundas o de los nervios que controlan la sensibilidad del cuello o el movimiento de los músculos de la cara o cuello.
La curación anómala o retardada de las heridas es más propia de fumadores que de no fumadores. Los tratamientos de cuello, como otros procedimientos, debe ser individualizado para cada paciente. Dependiendo de las condiciones en las que se encuentre su piel, arrugas, acúmulos de grasa y musculatura, se podrán conseguir determinados resultados. Es muy importante que avise sobre cualquier medicamento que esté tomando (especialmente Aspirina) o sobre condiciones medicas especificas (como tener la tensión alta). Si Ud. fuma es muy importante que intente dejarlo al menos durante las dos semanas anteriores a la intervención y la semana posterior a esta.
Cómo se realizan los tratamientos del cuello
Los tratamientos de cuello se basan esencialmente en tres técnicas o una combinación de las mismas. Su situación personal aconsejará una técnica o conjunto de técnicas para conseguir un resultado satisfactorio. No todas las técnicas se pueden o se deben realizar en todos los pacientes.
Liposucción: Cuando el problema fundamental es un acúmulos de grasa en la papada y la musculatura y piel del cuello están en buenas condiciones, una liposucción de la zona suele ser suficiente para conseguir un buen resultado. La liposucción de papada suele realizarse bajo anestesia local acompañada de sedación (adormilamiento) y no necesita ingreso en hospital. Se
realiza desde tres incisiones; dos de unos 2 mm detrás de los lóbulos auriculares y una debajo del mentón. Desde las mismas se procede a la anestesia y posterior extracción de la grasa hasta conseguir un buen contorno del cuello. Deberá llevar un vendaje durante cuatro días.
Corset cervical: Si la piel del cuello muestra signos de flaccidez o su musculatura no se encuentra en buena posición será necesario recolocar estas estructuras. Aunque la cantidad de grasa no sea excesiva se suele iniciar la operación con una pequeña liposucción. Una vez terminada, se realiza una incisión de unos 3 – 3.5 cm debajo del mentón. Desde esta incisión se aborda la musculatura, se repara y se recoloca de forma que el cuello quede más estilizado. Con esta técnica es posible profundizar el ángulo del cuello en aquellos casos en los que el cuello es obtuso y tiene escasa forma. También es posible superar grados de flaccidez leves o moderados. La operación se puede realizar con anestesia local con sedación o con anestesia general y sólo en algunas ocasiones requiere ingreso en hospital por una noche. El vendaje se retira en una semana.
Lifting completo de cara y cuello: Cuando la flaccidez de cuello es moderada o severa y sobre todo si va acompañada de envejecimiento facial significativo es mejor elección realizar un rejuvenecimiento facial y cervical completo en el mismo tiempo. Esto evitará disbalances en la armonía facial. En este caso el cuello se tratará al mismo tiempo que la cara desde las mismas incisiones faciales como en el apartado de corset cervical.
Toxina Botulínica: Para tratar las “cuerdas” que en ocasiones produce la musculatura del cuello lo mejor es realizar algún tipo de lifting de cuello. En ocasiones se pueden tratar de forma parcial reduciendo su intensidad infiltrando toxina botulínica en los bordes. Consulte el folleto sobre Toxina Botulínica para mayor información.
Después de la operación
El postoperatorio no suele ser doloroso. Las molestias que generalmente aparecen suelen controlarse bien con analgésicos habituales y se suelen situar en los márgenes de la incisión. Deberá llevar un vendaje a modo de collarín durante unos cuatro días, sustituyéndose posteriormente por una prenda similar a una cinta elástica. El tiempo que deberá llevar esta cinta dependerá del tratamiento realizado, pero no suele superar los 14 días. Las visitas postoperatorias son extremadamente importantes para asegurar una correcta evolución.
Es normal que sienta la piel del cuello algo “acorchada”, esta sensación es transitoria y desaparece en unas cuantas semanas.
Considere como normal que la piel del cuello esté inflamada y presente moraduras, este aspecto solo durará unos 7 – 10 días si sigue nuestras instrucciones. Es aconsejable que no trabaje y que evite los ejercicios o actividades violentas durante al menos las dos semanas siguientes a la operación; deberá restringir los movimientos del cuello al máximo. La piel del cuello necesitará cuidados específicos y no deberá exponerla al sol o a rayos UVA durante al menos tres meses.
Aunque al principio pueda sentirse preocupado por el aspecto, piense que la mayoría de los pacientes regresan a una vida normal (incluyendo su trabajo) en unos 10-14 días si se ha realizado algún tipo de corset. Si se realizó una liposucción puede que esto ocurra en cuatro a seis días. En este periodo la inflamación se normaliza y desaparecen las moraduras. Las cicatrices tardan algunas semanas más en disimularse, pero finalmente se hacen prácticamente imperceptibles.
Información adicional
Si desea información sobre artículos científicos publicados por el Dr. Monreal sobre Lipoimplante y sobre células regenerativas puede consultar este enlace o buscar directamente en PubMed usando el buscador que verá más abajo (use preferiblemente términos en Inglés).
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